
Los paneles MK2 permiten realizar cerramientos autoportantes y con una gran capacidad de aislamiento térmico.
La terminación en obra con microhormigón estructural confiere a este sistema todas las propiedades estructurales del hormigón armado mientras que su núcleo de EPS de 15 kg/m3 de densidad le transmite una gran capacidad aislante sin originar puentes térmicos ya que no se necesita ningún tipo de estructura auxiliar (largueros y montantes inherentes a otros sistemas).
MK2 es un sistema pre-industrializado, en el que los paneles (el núcleo de EPS con las mallas de acero galvanizado en ambas caras) se fabrican y suministran en obra para su terminación in situ con la aplicación del microhormigón a través de un gunitado o un encofrado. Todo el proceso de fabricación, suministro y puesta en obra, queda perfectamente descrito y regulado en el DIT nº 455R/20 otorgado por el Instituto de Ciencias de La Construcción Eduardo Torroja al sistema.
Esto quiere decir que los paneles que llegan a la obra, debido a su ligereza (unos 6 kg/m2), permiten una gran rapidez de ejecución y son fácilmente manejables sin la utilización de maquinaria pesada ni medios de elevación. A diferencia de los sistemas prefabricados, la versatilidad del sistema en esta fase permite que cualquier panel sea utilizado en cualquier punto del cerramiento aprovechando cualquier recorte que se origine que podrá ser utilizado nuevamente en cualquier otro punto del cerramiento hasta la aplicación final del microhormigón.
El peso del panel, una vez gunitado, es de unos 170 kg/m2 un valor que sigue siendo muy bajo para la capacidad estructural resultante. Esta cualidad lo convierte en un sistema muy adecuado para la rehabilitación de edificios que tengan algo comprometida la estructura original.
Los espesores de EPS en los que se fabrican varían entre los 4 y los 20 cm. Los paneles se terminan en obra con una capa de microhormigón de 3,5 cm de espesor medio en ambas caras por lo que los valores de transmitancia térmica resultante oscilan entre los 0,810 y los 0,180 W/m2*K. Estos valores, combinados por supuesto con los demás factores de diseño arquitectónico, permiten alcanzar unos valores óptimos en los criterios de calificación energética.
La terminación con hormigón ofrece un soporte adecuado para multitud de acabados como pueden ser chapados, aplacados, monocapas y la instalación de fachadas ventiladas.
En resumen, MK2 es un sistema que permite la ejecución de cerramientos con alta capacidad portante y de aislamiento térmico, admitiendo todo tipo de acabados. Todo ello en plazos de ejecución muy cortos y evitando el uso de grandes medios de elevación y de puesta en obra con todo lo que esto supone para el ahorro en el presupuesto.